La relación del príncipe Harry y Megan Markle con el resto de la familia real británica, está bastante tensa desde que los duques de Sussex abandonaron la realeza; las asperezas fueron bastante evidentes, con un mal gesto durante el Día del Recuerdo, que dejó al príncipe devastado.
El pasado domingo se llevó a cabo en Inglaterra el también llamado Día de la Amapola, un acto anual en el que la monarquía rinde homenaje a sus héroes de guerra; aquellos que murieron por la libertad de su país.
La familia real en pleno ofrece coronas florales bien adornadas a los héroes; Harry quiso unirse en esta tradición, dado su grado militar; pero se le negó el privilegio de una forma nada sutil.
También puedes leer: ¡Conmovedora! Florinda Meza no deja que muera el recuerdo de su esposo Chespirito
Quien fuera el duque de Sussex, fue totalmente excluido de la ceremonia; pese a que en algún momento fue el nieto favorito de la reina Isabel II.
Harry pidió que se hiciera una corona que llevase su nombre y, aunque la reina consintió en ello; al momento de ofrecerla fue rechazada por Palacio, ya que ni Meghan ni él forman parte de la institución. .
Una fuente cercana a los Sessex contó a la revista People, que el gesto por parte de la realeza lastimó profundamente al príncipe.
“Harry entiende que ya no tiene ningún rol formal dentro de la familia real, pero esa decisión le ha dejado totalmente devastado y muy decepcionado”, dijo la fuente.
Sin embargo, Harry y Megan decidieron celebrar su propio Día del Recuerdo en un cementerio de Los Ángeles; allí posaron para la prensa, en su propio homenaje.
Depositaros flores en dos tumbas: una en recuerdo de los que fallecieron en servicio de la Real Fuerza Aérea Australiana; y otra por los soldados de la Real Artillería Canadiense.
Las imágenes resultaron del todo polémicas.
Estamos en Instagram, Twitter, Facebook y YouTube.
Únete a nuestros canales de WhatsApp y Telegram.